11 mayo 2008

El hombre más rápido sobre la Tierra.











Pocos se atreverían a exponer su cuerpo como lo hizo John Paul Stapp. El coronel Stapp, fue un conejillo de indias voluntario que realizó pruebas a velocidades que superaron las 632 millas por hora, subido a un trineo sobre rieles impulsado con cohetes. Así pasó a la historia como el hombre más rápido sobre la tierra. Su aporte a los avances en sistemas de seguridad en aviones fue su legado, los efectos de los experimentos sobre su cuerpo lo acompañarían el resto de su vida.

Todos hemos visto en algún documental los llamados crash test dummy, un término inglés que se refiere a las pruebas de seguridad con maniquíes en automóviles. El caso es que en los experimentos de los que hablaremos, el maniquí fue reemplazado por un humano: el coronel John Paul Stapp. Las pruebas realizadas en 1954, eran parte de un estudio sobre los efectos de las fuerzas de aceleración y desaceleración en los seres humanos realizado por la Fuerza aérea norteamericana.

Stapp, contaba con un doctorado en Biofísica, un título de Médico y un título honorario de Doctor en Ciencias. Luego de entrar al ejército en 1944, sus conocimientos lo inclinaron a intentar comprender las tensiones que tendrían que hacer frente los pilotos, dentro de un programa de investigación de supervivencia en accidentes de la Fuerza Aérea norteamericana. Por ello se convirtió en su propio objeto de prueba, participando voluntariamente en 29 experimentos de trineos impulsados por cohetes.

El Desacelerador Humano

El "desacelerador humano" ("Gee whiz") era el nombre con que se conoció el aparato de experimentación: consistía en una especie de trineo de unos 680 kg de peso impulsado por cohetes, montados en una vía de ancho normal de 610 m. La plataforma contaba con un sistema de frenado mecánico que probablemente fue uno de los más poderosos jamás construidos.

En su más célebre viaje, el 10 de diciembre de 1954, un cohete lo acelera de un punto a una velocidad de 632 millas por hora en sólo cinco segundos, para luego detenerse en una parada abrupta en sólo 1,4 segundos. Stapp sufrió reiteradas y diversas lesiones incluyendo extremidades y costillas rotas. Después de los experimentos, Stapp exhibe el efecto en sus "ojos rojos" causados por capilares rotos y hemorragias. Sin duda la parte más vulnerable de la anatomía humana fueron los ojos, trauma que debió soportar a lo largo de su vida: persistentes problemas de visión causados por la explosión reiterada de los vasos sanguíneos lo acompañaron el resto de sus días.

En uno de sus últimos experimentos, Stapp fue sometido a 46,2 veces la fuerza de gravedad. El doctor Stapp demostró que un humano puede soportar al menos 45 g (440 m / s ²) en la posición hacia adelante sobre el trineo, con suficiente arnés. Hasta el momento, es la prueba de aceleración voluntaria más alta realizada por un ser humano. Sin embargo, el Dr Stapp afirmaba que la tolerancia de los seres humanos para acelerar aún no se había alcanzado en las pruebas, basándose en los efectos experimentados en su cuerpo.

Sus experimentos tuvieron profundas consecuencias en los sistemas de seguridad en la aviación civil y militar: se utilizaron para diseñar los aviones más seguros y los asientos de eyección que salvarían la vida de cientos de pilotos en emergencia. Pero además, los diagnósticos sobre los efectos de la velocidad en su cuerpo permitieron prever las tensiones que podrían ser experimentadas por los futuros viajeros espaciales.

El legado de John Paul Stapp no se limita al aire. Sus experimentos comprobaron la eficacia de utilizar un cinturón de seguridad en los coches (tema que mencionaré más adelante), demostrando que aumentan considerablemente las posibilidades de sobrevivir en caso de accidentes. John Paul Stapp fue uno de los principales defensores de su utilización.

Stapp se retiró del ejército en 1970 con el grado de coronel en 1970. Murió tranquilamente en su casa a la edad de 89 años.

Información y más imágenes en 1. 2
Las imágenes están publicadas en Ejection site y son cortesía de EAFB History Office.

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5 comentarios:

  1. Sorprendente que después de haber llevado su cuerpo a esos extremos tuviera una muerte tranquila a los 80 años. A ver si la mejor manera de alargar la vida va a ser tratando de llevar al cuerpo al límite.

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  2. De esta forma decidió Stapp pasar a la historia...

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  3. Jaac: habría que hacer un estudio sobre los efectos positivos de tal experimento. Yo pongo el trineo y los cohetes...¿algún voluntario?.

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  4. Yo casi que te ayudo a montar el trineo con los cohetes y pongo los raíles... Para mí que este experimento sólo puede tener efectos positivos una vez y ya fue en el cuerpo de Stapp, los demás seguro que van a peor.

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  5. cuidado con lo que desean miren lo que le paso a GREENpeace

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